martes, 27 de agosto de 2013

"UN TEMPLO: WAT PHO O EL BUDA RECLINADO"


En Tailandia la palabra "Wat" tiene un significado de "templo" pero entendido en sentido amplio, como un conjunto de edificios en un recinto cerrado o rodeado por un muro o claustro que normalmente suele tener sus paredes cubiertas con murales que cuenta historias. Es el lugar en el que viven los monjes, con carácter de monasterio.
 
Los wats suelen tener, uno o varios "chedis" o estupas para contener alguna reliquia de Buda o las cenizas de algún rey o miembro de la familia real. El "wihan" como un salón de actos o reuniones. El "bot" o salón de ordenaciones que está reservado para los monjes, el "mondop" especie de biblioteca para guardar los textos sagrados..etc

En Bangkok hay dos templos insignia, el Wat Arun, del que hablaré en otro momento y el Wat Pho que ocupa unas 8 hectáreas y  que al estar muy cerca del Palacio Real se puede ver después de terminar la visita al Palacio. El horario del templo es de 8.30 a 18.00 h. Con la entrada te regalan un vale para que lo canjees por una botella de agua, un detalle que es de agradecer por las elevadas temperaturas de la ciudad y la necesidad de hidratarse continuamente.

Al entrar no te sorprende la arquitectura que es muy similar al Palacio Real. Arquitectura tailandesa tradicional con sus tejados de colores...etc. Lo impresionante llega después, este wat tiene el privilegio de albergar entre sus muros al Buda reclinado más grande de Tailandia. Al leerlo no impresiona, pero cuando entras en aquel templo, previamente te has tenido que descalzar, y saltar el umbral, ya que uno de los 9 espíritus que viven en los edificios mora en los umbrales, según los usos y costumbres tailandesas. Descubrirás a esa figura echada o reclinada sobre su brazo derecho de 46 metros de largo por 15 metros de alto, cubierto de pan de oro, con ese aspecto relajado, facciones delicadas y elegantes. Cuando clavas la mirada en sus enormes ojos de nácar, puedo asegurar que algo se te mueve por dentro...

Esta perfectamente encajado en el templo, hay un pasillo y no dejas de escuchar un tintineo constante, llegas a los pies, que superan los 3 metros y están bellamente labrados, como los ojos en nácar, haciendo diversos dibujos y formas en total 108 "lakshanas" (marca, señal o símbolo por el que es conocido Buda), y al girar para ver de espaldas a Buda verás que el sonido se produce por la caída constante de monedas en una serie de cuencos.




El Wat Pho, tiene otro record, al ser el templo con más Budas, cuentan que más de mil, sinceramente no me pare a contar. Están por todo el recinto al igual que los "farang" o guardianes que custodian todas las puertas, tiene influencia china. Son estatuas grandes, con barba, sombrero...y dicen las malas lenguas que ridiculizan a los occidentales.




Hay montañas en miniatura, estanques con peces japoneses, varios chedis adornados con hermosas porcelanas. Al verlos imaginas la cantidad de paciencia que hay que tener decorar algo así, pieza por pieza. Evidentemente, yo de manualidades fatal.




Hay un árbol Bodhi, se dice, que Buda siempre meditaba debajo de un árbol de esta clase para alcanzar la iluminación en India y el del Wat Pho es un esqueje de dicho árbol.

Mi sugerencia es visitar este wat por la tarde. A última hora, sobre las seis de la tarde, entra en el templo de mármol, Phra Buddha Deva Patimakorn o bot principal del templo. Contiene una imagen de bronce de Buda, en postura de meditación sentado, traída de Ayuthaya antigua capital de Tailandia por el hermano de Rama I. Llama la atención que esta protegido por un parasol de varias capas. Pero lo interesante es que a esas horas los monjes y monjas, que también las hay en Tailandia. Comienzan a rezar, recitando como cantando sus oraciones y se crea un clima, un ambiente que merece la pena vivirlo, te sentirás relajado y sereno.

Por último, en Wat Pho se alberga la Escuela Tradicional de Masajes, no desaproveches la ocasión para darte un buen masaje de pies o de cuerpo, económico y por profesionales.


 
 

 

*NOTA: De lo divino a lo humano o de lo divino a lo profano. La música la pone Palmy, cantante tailandesa de pop.


martes, 13 de agosto de 2013

"RETRATOS DE TAILANDIA (I)...LLEVANDO MERCANCIAS"


En tus primeros paseos por Bangkok vas a notar el contraste, la diferencia cultural, el toque budista, la presencia de la monarquía...etc. Todo es nuevo y distinto para un europeo o al menos para mi.
 
Las calles con un congestionado y ruidoso tráfico. Hacen de esta ciudad que en su lengua original significa "La Ciudad de los Ángeles" una ciudad que no duerme. Tiene una población de casi 10 millones de habitantes que llenan sus calles animadas de vida y color.
 
Los colores blanco, azul y rojo que simbolizan al budismo, a la monarquía y a la nación están presentes en la bandera tailandesa. Su elegante escritura no te va a pasar inadvertida en los números carteles de información, de publicidad...etc.
 
Pese a las jerarquías sociales que ya vienen impuestas incluso por el "wai", saludo tailandés juntando las manos cerca de la barbilla que siempre se inicia por el de clase inferior, tiene diferencias  dependiendo de la edad, sexo y rango social. Eso determina que se deban mantener las manos más alta y por más tiempo. Ese gesto es un signo de respeto hacia la otra persona y que inclinando la cabeza te van a ofrecer siempre una cálida sonrisa.
 
Mi sugerencia es observar, disfrutar de las calles y sobretodo de la gente.
 
 
 
Vas a ver a vendedores ambulantes que en sus pequeños carritos transportan de todo lo imaginable y vendible. Frutas y verduras exóticas. Verduras nunca vistas. Cestos. Exuberantes flores. Comidas, frituras...También, con la mayoría de ellos, tendrás que regatear.
 
Ellos saben que tu les observas y siempre van a posar con una sonrisa. También es cierto que Tailandia, "el País de la Eterna Sonrisa" a hecho de ello su slogan turístico. Son amables y tranquilos, dice que es por influencia del budismo el que sean muy tolerantes. Les parece de muy mala educación los enfrentamientos, hablar alto o las salidas de tono.
 
 
Tienen también un lenguaje corporal que señala a la cabeza como la parte sagrada del cuerpo y por eso no debes nunca tocar la cabeza de nadie y menos de un niño. En contraposición, los pies son la parte más baja y en los templos hay que ocultarlos sentándote encima y no hay que señalar una imagen de Buda con los pies.
 
Por último quiero resaltar un hecho bastante progresista y es que desde el 5 de agosto del 2011 es una mujer, Yingluck Shinawatra, la Primera Ministra del país.
 


*NOTA: La música es de ,Tai Orathai, es la cantante tailandesa de Lut Thung (es la forma más popular de un estilo de música tailandés) que ha vendido más de un millón de discos.



 
 
 

jueves, 8 de agosto de 2013

"EL GRAN PALACIO REAL EN RATTANAKOSIN, BANGKOK"


 
Lo primero, más básico e imprescindible que hay que ver en Bangkok es el Gran Palacio Real.
 
Por los alrededores del mismo no hay parada ni de Skytrain, ni de metro. Una de las formas de llegar es en barco, utilizando la línea naranja del Chao Phraya Express, es la parada del muelle "Tha Chang (9)". El Gran Palacio Real es un conjunto de edificios bordeados por un 1.9 km de muralla. La entrada al recinto es por la calle Thanon Na Phra Lan, la misma calle del muelle. Es importante porque sino te tocará dar un paseo de casi dos kilómetros. Allí puedes comprar las entradas, 500 baths, unos 12.5 euros. Es importante conservar la entrada porque la misma sirve para ver la Mansión Vimanmek y la Sala del Trono Anata Samakhom que se encuentran en Dusit, otro distrito de la ciudad. Su validez es de 7 días.
 
El Palacio abre todos los días de 8.30 a 15.30 h. Insisto, todos los días, porque es un clásico de Bangkok que en la entrada aparezca alguna o algunas amables personas que te indiquen que esta cerrado para ofertarte ellos una ruta turística alternativa para ese día. Hay incluso carteles colgados en los muros del Palacio que alertan de: "desconfía de los amables desconocidos". En mi caso, no se acerco nadie y eso que me baje una parada antes del embarcadero y me toco andar un buen trozo hasta encontrar la puerta, pero si es cierto que en un templo de Bangkok, días después, alguien intento utilizar esta misma treta.
 
Otro dato importante a tener en cuenta antes de entra al Palacio es la vestimenta. Es obligatorio en las mujeres que no se te vean las rodillas, hay que llevar falda o pantalón largo. Y tampoco puedes llevar al descubierto los brazos. Lo mismo sucede para los hombres, siempre pantalón largo. Si no cumples con la vestimenta obligatoria tendrás que comprar en las taquillas del Palacio, pareo o pantalón largo.
 
Dejo enlace oficial del Gran Palacio Real:
 
 


Una vez que atraviesas la entrada tienes acceso a otro mundo, otros colores, otra arquitectura, otra forma de entenderlo todo. Totalmente nueva y distinta, al menos, para mi.
 
 
 
Te reciben unos imponentes guardianes llamados, Thotkhirithon, figuras de 5 metros. Su presencia impone, diablos burlones, vigilantes, coloristas. En la mitología tailandesa representa a guardianes de tesoros. Y para compensar verás también a otras criaturas mitológicas, Apsonsi, que desprenden elegancia y delicadeza, son mitad mujer y mitad león.
 
Entras en una vorágine de no saber bien donde mirar. Párate un segundo, respira profundo y comienza a observar con tranquilidad lo que te rodea. Estas ante la que fue residencia oficial de la Dinastía Chakri, desde el rey Rama I hasta Rama VIII, han vivido allí. Ha sido el rey actual Bhumibol Adulyadej, Rama IX,  el que trasladó la residencia oficial al Palacio Chitralada en el distrito de Dusit.
 
Y en este escenario, que se comenzó a construir en 1782,  puedo imaginar a Mongkut. Mi favorito de la Dinastia Chakri es el rey Mongkut o Rama IV. Tengo una visión subjetiva, romántica y en gran parte proporcionada por el cine. "Ana y el Rey de Siam" (1946) de John Cromwell y un remake posterior con Jodie Foster interpretando a la institutriz Anna Leonowens, "Ana y el Rey" (1999). Dejo enlaces de la información de las películas.
 
 
 
En uno de sus diálogos Mongkut dice: "cuando una mujer tiene mucho que decir y no habla, su silencio resulta atronador". Aquí no hay silencio, se escucha en susurro las oraciones de los monjes que suenan a canción de cuna que calma y relaja la visita. 
 
El primer recinto engloba una serie de edificios entorno al Wat Phra Kaeo o Templo del Buda Esmeralda. Es el Buda más venerado de toda Tailandia y también el lugar de peregrinaje más famoso del país. Es una imagen de 45 cm. de jade no de esmeralda que sólo podrás ver de lejos y desde fuera del templo, ya que sólo el rey tiene entrada a este templo. Se realizan 3 ceremonias al año para cambiarle de vestimenta en los cambios de estación (verano, invierno y lluvias) que realiza el rey.
 
 
 
Te va a llamar la atención por su brillo y color dorado intenso el Chedi o Estupa Dorada, es el Phra Si Rattana Chedi, guarda la reliquia del esternón de Buda.
 
El Panteón Real, que abre sus puertas una vez al año el 6 de abril y tiene las estatuas a tamaño real de los siete primeros reyes de la Dinastía Chakri. Aunque no puedas entrar su espléndido exterior es por si mismo suficiente como sucede con la biblioteca o Phra Mondop que contiene las Escrituras Budistas y cuatro budas, cada uno en una esquina. Entre templo y templo, se encuentra una maqueta de Angkor de un wat de Camboya que mando realizar Rama IV.
 
Para soportar el calor, refúgiate en el claustro y sigue las fantásticas pinturas en fondo granate que cuentan el "Ramakien", es una versión tailandesa del Ramayana indio y es una alegoría del triunfo del bien sobre el mal. Rama es el rey ideal y Tosakan, es el malo, el rey demonio.
 
 
 
 
En la segunda parte del recinto se nota un cambio radical en la arquitectura, es una fusión entre el estilo tradicional tailandés y occidental sobretodo neoclásico o estilo renacentista italiano. Destaca:
 
* El salón del trono Chakri, mandado construir por Rama V para el celebrar el centenario de la dinastía.
* El salón del trono Dusit, que muestra el trono original de Rama I de teca y nácar.
* Phra Buddha Ratana Sathan, capilla privada de Rama IV en mármol gris.
 
Otros sitios de interés son los jardines Siwalai o el Museo de Textiles de la Reina Sirikit donde además de ver la evolución de la moda tradicional femenina tailandesa sobre vestidos de la propia reina te podrás refrescar un ratito de las altas temperaturas del exterior, ya que disfrutar de todo el recinto del Palacio lleva entre 3 o 4 horas.
 
 
 
Casi al final del recorrido se encuentra la cafetería del Palacio Real, a la que llegas deshidratada y exhausta. En este caso, mi no sugerencia, es no tomar helados, de la única marca internacional que vende en dicho bar, ya que pague 500 baths por 2 bolas de helado de mango.
 
Una de las cosas que me lleva a viajar es la emoción y las sensaciones. Me gusta que los lugares, las personas, la música, la pintura transmitan... y me emocionen, me lleguen. Y este es uno de esos sitios...
 
 
 
*NOTA: Saksit Vejsupaporn, cantante y pianista tailandés que se pregunta en la canción, ¿dónde esta el amor?.
 
 
 
 
 

 
 
 
 
 


domingo, 4 de agosto de 2013

"RUMBO A BANGKOK"



Es mi primera vez en el Sudeste Asiático...
 
La mejor opción que me daban los buscadores de vuelos, para que el billete de avión saliera económico, es no ir en vuelo directo sino hacer escala. En mi caso, el mejor precio me lo daba Qatar Airways, y además directamente en su pagina.
 
Así comienza el viaje con el vuelo Madrid-Doha. En la puerta de embarque aparecen, como si de un pase de modelos se tratase, los 16 miembros que forman la tripulación de la Qatar Airways. Todos ellos de diferentes nacionalidades. Caminan con parsimonia y elegancia. Inevitablemente toda la gente que estaba esperando para embarcar les mira.
 
 
La primera anécdota se produce cuando de manera espontánea nos saluda el comandante O.T., canario. Es un hombre sencillo, simpático y agradable. El es la persona que nos llevará a Doha, la capital de Qatar.
 
El aterrizaje es de noche. Es importante que verifiques el color del borde de tu billete puede ser amarillo, naranja, morado. El traslado de la pista al aeropuerto es en autobús y este realiza diferentes paradas, te tienes que bajar en la parada que corresponda con el color que tengas en el billete.
Nos esperan 9 largas horas en el Aeropuerto Internacional de Madu Palsu. Sugerencia: en este aeropuerto hay "una sala de descanso", cercana a los servicios. Esta aislada, fresquita con aire acondicionado, tumbonas para dormir y descansar. Seguir las indicaciones de "Quiet Zone".
 
Todos los aeropuertos son caros, pero en este, si consumes algo es carísimo. Eso sí hay Wi-Fi gratuito en toda la terminal.
 
 
Comienzo a observar la gran cantidad de rasgos asiático diferentes que existen. Me fascina la variedad. Amanece en pleno desierto. Ya puedo decir que he visto amanecer en Doha.
 
 
 
 
Por fin, la segunda parte del viaje nos llevará a Bangkok. Después de más de 6 horas de vuelo y cambios horarios, desde la ventanilla del avión tengo la 1º imagen de esta ciudad. Es curioso, si en Qatar amanecía, en Tailandia el sol se esta poniendo. Abajo, en el suelo, hay una alfombra compuesta por diferentes tonos de verde oscuro. Hay una vegetación exagerada, arrebatadora, con agua, mucha agua que brilla.
 
Son las 19.20 h., una bofetada de calor nos recibe al salir del avión. Los trámites con inmigración son ágiles y rápidos. Hay 2 líneas de tren que comunican el Aeropuerto Internacional de Suvarnabhumi con el centro de la ciudad: City Line o Express Line para llegar al centro de la ciudad. Adjunto enlace de otro blog que lo explica de maravilla:
 
 
En mi caso, como era de noche, elegí la opción de ir en taxi al hotel.
Una vez que recojas tu equipaje, busca la señalización de "Taxi Público", vas a llegar a un mostrador que esta ya fuera, en la calle donde podrás indicar la dirección o el hotel al que vayas. Te van a transcribir esta dirección a tailandés, te van a decir el importe final del trayecto incluido el peaje de la autopista (mi trayecto fueron 350 baths, unos 8.75 euros). El precio es bastante aceptable. Los taxis son de color o fucsia o un combinado de verde y amarillo.
Este es un servicio que funciona genial porque el resto de tu estancia en Bangkok tendrás que luchar, ajustar y regatear con los taxistas, o con los que llevan los tuk-tuk o bien, el precio del trayecto o que utilicen el taxímetro.
 
El primer contacto con la ciudad es ver las modernas autovías y edificios. Según nos adentrábamos en Bangkok, el hotel estaba en la zona de Sukhumvit. Sukhumvit, es una calle principal. Las calles principales se llaman "thanons" seguidas del nombre de la calle (Thanon Sukhumvit). Es importante que sepas para orientarte o buscar una dirección que de estos "thanons" o calles principales, salen multitud de "sois" o callejones que llevan el mismo nombre de la calle con una enumeración (Soi Sukhumvit 22). Y dependiendo de si es par o impar esta a la derecha o a la izquierda de la calle principal, es decir, todos los callejones pares esta a un lado y todos los callejones impares esta a otro.
 
Compruebo que la calle del hotel está llena de vida, de luces de colores, de bares abierto a la calle llenos de gente, de puestos de masajistas...
Nuestra primera cena es en un bar de esta calle en Bar Som's, media docena de chicas exóticas, amables y sonrientes hacen lo imposible para que nos encontremos a gusto. Menú en cuenquitos con arroz, bambú, brochetas de pollo que se untan en una salsa que sabe a cacahuete y cerveza local. Hay 2 marcas, Chang y Singha.
 
Podía notar el calor pegajoso y el cansancio del viaje, pero me sentía feliz. Esa felicidad que te recorre el cuerpo como si hubieras tomado champan. Era feliz de estar por primera vez en Bangkok.
 
Nuestras, ya amigas del bar, nos despidieron con un "wai" o saludo tailandés y diciendo todas a coro "see you tomorrow"...